Análisis de coyuntura. 1. Elementos de la situación actual. 2. Reflexiones. 3. Diagnóstico. 4. Tendencias. 5. Sugestiones. 1. Elementos de la situación actual. Algunos de los indicadores presentes en estas últimas semanas: a) Ofensiva de Bush. Escudo antimisiles, ofensiva diplomática, radicalización del apoyo a Israel. b) Resultados electorales en diversos países. Perú, Italia, Bulgaria. Retroceso electoral de las izquierdas a nivel mundial. c) Crisis de Aerolíneas Argentinas. Interesante manifestación de las formas colonialistas que asume el capital europeo. d) Agresión israelí, Intifada y conversaciones. e) Levantamiento popular en Argelia. f) Aumento de movilizaciones y respuestas represivas en Chile. g) Intercambio de prisioneros en Colombia. h) Movilizaciones en Bolivia. i) Fuertes movilizaciones y represión en Argentina. j) Inestabilidad en Venezuela. k) Aumento represivo en Chiapas. l) Choques en Gotemburgo. m) Negativa irlandesa a la Comunidad Europea. n) Readecuaciones institucionales en Brasil. o) Crisis continuada del estado en Paraguay. p) Crecimiento de las luchas llamadas globales. q) Gran movimiento popular de resistencia en República Dominicana. 2. Reflexiones. Es muy delicado el panorama actual, pues la contradicción entre la modernidad y la marginalidad aumenta tremendamente cada día. La tecnificación de los procesos industriales y burocráticos, así como las comunicaciones y otras áreas, permiten la creación de un vasto entramado de propietarios, funcionarios, técnicos y militares, cada vez más reducido y amalgamado. Y por el lado opuesto, crecen los marginados, los pobres, los discriminados, los agredidos, los hambrientos, los enfermos, los raquíticos, los muertos. El modelo capitalista neoliberal internacionalizado o globalizado o pos-imperialista, o como lo quieran llamar, reproduce su estructura piramidal en cada uno de los países del planeta, asentando en ellos también una pequeña capa de propietarios, funcionarios, técnicos y militares que se sobreponen al resto de la sociedad también compuesta mayoritariamente por los marginados, etc. Esa contradicción destapa y revienta por distintos lugares, haciendo agua y rompiendo los diques de contención, que ya no pueden contener la ansiedad y rebeldía de los pueblos. América Latina es un polvorín de donde escapan chispas cada cierto tiempo mostrando la inconformidad junto a la capacidad de los pueblos para salir a la calle y enfrentarse valientemente a los guardianes del orden. Argentina es un claro ejemplo de ello, mientras Cavallo intenta armonizar los intereses de la punta de la pirámide argentina con el capital internacional a costa del mayor empobrecimiento de la población, los desempleados y otros segmentos sociales oprimidos resisten en las calles, piquetes, etc, teniendo que lamentar tres compañeros asesinados en estos últimos días, sin contar con las elevadas cifras de presos y la nueva legislación policial ad portas. República Dominicana ha entrado en el ciclo de protestas regionales con gran convulsión social, en tanto en Bolivia, Paraguay y otros se mantiene la movilización popular con huelgas, paros regionales, cortes de carreteras, etc. El crecimiento de la lucha por la autonomía mapuche con ocupaciones de tierras y enfrentamientos, las multitudinarias movilizaciones de secundaristas en Chile, las manifestaciones en Panamá, la crisis de Venezuela y Colombia, los combativos movimientos indígenas en México y Ecuador, además de otros países centroamericanos, demuestran que toda esta convulsión no es una hipótesis ni una posibilidad, sino una avalancha de acciones en los más diversos lugares, cada uno con sus características, su fuerza y sus particularidades internas, donde diversos focos menores de conflicto dividen las fuerzas represivas que deben correr de una confrontación para la otra, encontrándose con una rebeldía cada vez más fuerte en cada lugar. En Europa, como en USA y Canadá, especialmente la primera, foco de grandes movilizaciones globales anticapitalistas, las cosas se están dando de otro modo, notándose una ausencia de acumulación de fuerzas locales, nacionales o regionales, lo que se ha debido substituir por la capacidad de agrupar para golpear en un punto a todos los grupos que más o que menos coinciden en la lucha contra el enemigo común. Esa división espontánea de las formas de lucha social, centralizada en Europa y descentralizada en América Latina, parece ser un fenómeno histórico digno de un mayor estudio. Podemos suponer que las formas de lucha en África y Asia asumirán variantes e introducirán modificaciones, algunas de las cuales ya es posible observar a partir de las experiencias de las luchas en Indonesia y Filipinas, en Palestina y ultimamente en la región Bereber de Argelia, movimiento que ha incendiado el país completo, presentándose en estos momentos al menos cuatro o cinco diversos focos regionales de conflicto, siendo cada región de características diversas. Lo interesante es que hoy se verifica una dinámica distinta a años anteriores donde las principales luchas se daban en la capital, Argel, o por conducciones globales, como el FIS o el FFS, que están siendo sobrepasados fuertemente por las organizaciones autónomas de las diversas identidades históricas que conforman el mapa del magreb, parte hoy encerradas en los límites artificiales argelinos. No es por otros motivos que las principales luchas orientales, como los Tigres Tamiles, Palestinos, chechenios, kurdos y otros, tengan como base la autonomía territorial, la recuperación y proyección de su historia e identidad cultural. Así como también se explica el crecimiento en los últimos tiempos de las luchas nacionales en Córcega, Sardenha, Bretones y otros, sin hablar de los balcanes, donde la situación continua explosiva y las antiguas regiones dominadas por Rusia. En África el proceso es muy complejo, debido a las divisiones establecidas por los viejos y nuevos colonialistas, especialmente en el cuerno africano, donde las pugnas entre Somalía, Etiopía y Eritrea no se han resuelto para nada, así como en la región de Congo, Uganda y vecinos. Sólo la reconstrucción de las comunidades históricas, desde abajo y con autonomía, podrá ofrecer horizontes viables, y allí la experiencia Bereber puede jugar un gran papel. En Brasil se ha presentado un tipo de situación política que satisface mucho a los europeos y demás del primer mundo, pues por encima de las características propias del país, se han difundido dos formas de actuación, una es la reformista y la otra es la que copia los modelos de lucha global de los países centrales. La variante reformista pretende aprovechar los avances electorales de la socialdemocracia, a la cual se han aliado diversos grupos y movimientos de carácter centralizador que focalizan su actuación estratégica más en función de ganar el aparato del estado que de potenciar la riqueza de la diversidad. Y los que copian las formas de lucha global no toman en consideración la necesidad de constituir fuertes bases de apoyo en el pueblo pobre que se insurge por todas las otras partes del continente. Es claro que hay excepciones en ambos campos. 3. Diagnóstico. El imperio del capital no está consiguiendo establecer un modelo político para sujetar la ansiedad de las masas. Las fluctuaciones electorales en Europa, por ejemplo, muestran la ausencia de proyectos estatales fuertes como antes. Hoy todas las elecciones son decididas por pocos votos y el bipartidismo se ha establecido en todas partes, haciendo de la izquierda un furgón de cola para los que presentan discursos menos agresivos. La ingeniería electoral que se desarrolla en torno a ello es impresionante. Basta ver también las experiencias en Perú, Chile y Argentina, así como muchos otros. Los pueblos se están insurgiendo desde abajo por todas partes y las más violentas represiones son arrojadas sobre ellos. Los indígenas de Chiapas, organizados en el zapatismo, dieron inicio a una nueva fase de organización y luchas, que ya venía dándose poco a poco en los más diversos lugares, pero su irrupción en 1994 fue un duro golpe para el capital y que tuvo profundas repercusiones en la sociedad mexicana extendiéndose por el mundo. El llamado zapatista a luchar por la humanidad fue acogido en muchos lugares y eso permitió legitimar y multiplicar las diversas experiencias de base. Aún falta mucho por aprender y descubrir. Así la contradicción entre un bloque de estados capitalistas por un lado y un bloque de estados socialistas por el outro, dejó lugar a outra, que no es puramente ideológica como algunos piensan, algo así como capitalismo y socialismo, sino que ahora asume características más objetivas, donde se observa por una parte el bloque dominante a nivel mundial en esa alianza que comentamos de los propietarios con algunos funcionarios, técnicos y militares, dirigidos obviamente por el gran capital internacional, que forman esas pequeñas puntas de pirámides en cada país, y por el outro lado los millones y millones de parias que forman parte de una vasta red de diversos oprimidos, cada uno con sus problemas específicos desde los cuales es posible partir para la lucha. 4. Tendencias. Todo indica que el desempleo, miseria y pauperización de las masas continuará aumentando, lo que llevará al capital cada vez más a buscar salidas duras para contener, y combinando con salidas blandas, para engañar. Unos y otros continuarán usando el discurso hipócrita democrático e intentarán separar más las aguas de los irreductibles, para evitar que las manifestaciones de resistencia escapen de las reglas del juego establecido. Ya la represión está modificando su comportamiento en los más diversos lugares, como muestra la acción militar en Chiapas, la militarización de los territorios mapuches, la nueva legislación argentina, las decisiones europeas después de Gotenburgo, las medidas de Bush, el Plan Colombia y muchos otros ejemplos. Los pobres seguirán su marcha ascendente de rebeldía en los más variados lugares y formas de organización y lucha. Será muy dificil para la dominación contener esas manifestaciones sin recurrir a violentos expedientes disuasivos, lo que aumentará la espiral de protestas. Los sectores identificados como democráticos y progresistas continuarán profundizando la línea de incorporación de las masas a las más diversas formas de participación dentro de las instituciones, sean estatales, como elecciones, participación en consejos populares de todo tipo vinculados a los municipios,etc, como los denominados no estatales, como ONGs, voluntariado, en fin lo que se ha dado en llamar tercer sector. 5. Sugestiones. Parece interesante observar mejor el desempeño así como las formas de surgimiento de las diversas identidades en lucha, como los indígenas ecuatorianos o los propios bereberes. También es importante acompañar la notable modificación de los estudios antropológicos que se está produciendo en México, Ecuador, Perú y Chile, donde en años anteriores parecía predominar la metodología estructuralista y sociológica, especialmente en Brasil, donde aún predomina la escuela dejada por Claude Lévy-Strauss. Hoy los nuevos antropólogos en esos países operan mucho más con el estudio de la identidad histórico-cultural y la autonomía de las comunidades humanas, especialmente aborígenes y étnicas. Nos parece, además, necesario profundizar en la cuestión nacional como elemento objetivo histórico y cultural, apelando más a las raízes que a la formación de los modelos de dominación alrededor del capital. El apoyo incondicional a las luchas desde abajo también aparece como una necesidad y por eso nos preocupa la falta de atención que se otorga a la lucha de los bereberes, por ejemplo, que han conseguido incendiar Argelia por todas partes. Eso nos recuerda la falta de apoyo que muchos sectores de izquierda tuvieron con Cuba en los primeros momentos de su lucha contra Batista, para luego adherir cuando las cosas estaban bajo un control que inspiraba confianza ideológica en muchos partidos. La lucha de los pueblos puede presentar innovaciones dignas de ser multiplicadas en su momento para poder golpear simultaneamente en muchas partes. No parece necesario esperar a que un país detrás del otro va como cayendo igual que una uva detrás de la outra. Así como tampoco parece suficiente copiar lo que el outro hizo bien. Todas las luchas pueden ser distintas en tanto sean formas organizativas desde abajo, realmente democráticas y autónomas. Las tentativas de homogenizar, centralizar o, peor aún, hegemonizar las luchas, se transforman en algo nefasto y contraproducente. Todo indica que es más conveniente reconocer que existe una enorme diversidad planetaria y que muchas de ellas, las que pensamos que podemos apoyar, claro, desarrollan sus formas de lucha contra el enemigo concreto que le tira el pan de la boca. Por eso, las luchas globales sólo tienen sentido si reconocen y legitiman que la construcción de capacidades locales son un camino estratégico para acumular fuerzas reales contra la dominación. En Cochabamba, Bolivia, se van a reunir en septiembre 300 delegados de entidades, grupos y movimientos que participan en las acciones de la AGP, Acción Global de los Pueblos, así como muchos observadores. Nuestra idea es que dicha reunión reconozca que las formas de lucha en nuestro continente presentan una gran diversidad con las necesidades de los países del norte, por lo tanto el énfasis principal del encuentro debería ser el incentivo a la construcción de formas de organización y lucha local en el interior del pueblo pobre, con lo que se reconocería una realidad y a la vez se estimularía su multiplicación en el terreno de la diversidad en los demás continentes y países del sur. También pretendemos que se reconozca y salude la lucha del pueblo bereber, que con su ejemplo estimuló las luchas en otras regiones argelinas, lo que de hecho es una lucha global. Aspiramos a que en ese encuentro se valorize mundialmente la lucha de los desempleados argentinos, de los mapuches y estudiantes chilenos, de los indígenas ecuatorianos, de los zapatistas y de las comunidades colombianas que también necesitan participar de los diálogos para la paz, de los cocaleros de Bolivia, indigenas y campesinos paraguayos, de los indígenas, campesinos, negros y pobres brasileños, los indígenas venezolanos y de centroamérica, las coordinadoras barriales de República Dominicana, el movimiento contra el neoliberalismo de Panamá y muchos otros que se organizan y golpean de diversas formas. Así aprovechamos de proponer también que el siguiente encuentro sea en África. ---------- Informamos que proximamente estará la página web Red - Rede – Alternativa, página rebelde de la lucha de los irreductibles, que divulgará las luchas de base, sin esconderlas, además de todas aquellas que se desarrollen a nivel popular. Tendrá secciones por países y regiones, noticias diarias, análisis y secciones de comentaristas de varios países. Estamos recibiendo sugestiones para secciones, temas, etc. Los grupos y personas que lo deseen podrán tener allí también su sección para publicar sus comunicados, noticias y opiniones. Abrazos. Profesor J CEA